Marco Aurelio fue por mucho uno de los más influyentes filósofos estoicos, cuyas reflexiones sobre la virtud, la razón y el amor continúan dejando huella en la actualidad. Siendo joven, Marco Aurelio,que fue emperador romano desde el año 161 al 180, se volcó en la filosofía estoica,que hace hincapié en llevar una vida de virtud y moralidad. Admiraba a Epicteto porque vivió modestamente, tal como él mismo intentó hacer.
Al analizar su historia, veremos cómo el estoicismo modeló su vida y su liderazgo. Adéntrate en el mundo de Marco Aurelio,el filósofo-emperador de la antigua Roma,cuyas«Meditaciones»ofrecen una interesante visión de su diálogo interior. Más allá de ser una guía, estas reflexiones constituyen una conversación personal sobre los retos de la vida. Piensa en«Meditaciones»como en un diario en el que escribió sus pensamientos sobre el amor y sobre cómo relacionarse con los demás. No solo dio consejos. También relató sus dificultades y triunfos.
Las citas de Marco Aurelio sobre el amor y las relaciones
Marco Aurelio describió al estoico ideal como alguien libre de pasiones enfermizas e irracionales, pero lleno de amor. El estoico Séneca también escribió sobre el amor:
«Si deseas ser amado, ama».
Por lo tanto, vivir en armonía y hermandad con los demás parece formar parte de lo que los estoicos entendían como «vivir en armonía con la naturaleza». No obstante, comparado con nuestra realidad actual, podría ser un tipo de ideal utópico lejano. La virtud capital más directamente relacionada con nuestra interacción con los demás es la «justicia.»
Para los estoicos, la justicia es una forma de sabiduría social y moral. Consiste en dos elementos esenciales:
Amabilidad y benevolencia hacia el prójimo;
Trato justo e imparcial a los demás.
Citas de amor a la humanidad
«El alma se tiñe con el color de sus pensamientos».
Marco Aurelio, el emperador romano y filósofo estoico, a menudo hacía hincapié en la importancia de los pensamientos y la disposición interna. Esta cita refleja su creencia en que nuestros pensamientos moldean nuestro carácter y, en última instancia, nos definen.
Marco Aurelio creía en la importancia de tratar a los demás con amabilidad y comprensión. Defendía el amor y la compasión como cualidades esenciales para llevar una vida virtuosa y plena.
«Acepta las cosas a las que te une el destino y ama a las personas con las que el destino te une, pero hazlo con todo tu corazón».
«Adáptate a la vida que te ha tocado y ama de verdad a las personas con las que te ha rodeado el destino».
En sus «Meditaciones», Marco Aurelio reflexionaba con frecuencia sobre la naturaleza de la humanidad y nuestro lugar en el mundo. Una de sus enseñanzas fundamentales es el cosmopolitismo. Significa que el servicio a la comunidad contribuye al éxito y a la satisfacción por lo que uno hace. La actitud mental de aceptar todo lo que sucede con alegría supone la capacidad de tener un estado de ánimo tranquilo y sosegado, incluso en circunstancias difíciles.
«Adórnate con sencillez y con indiferencia hacia las cosas que se encuentran entre la virtud y el vicio. Ama a la humanidad. Sigue a Dios».
«Adáptate al entorno en el que te ha tocado vivir y muestra verdadero amor a los compañeros mortales con los que te ha rodeado el destino».
Citas de amor sobre la vida en familia
Marco Aurelio no escribió mucho sobre la vida familiar en su famosa obra principios filosóficos pueden ser aplicados a varios aspectos de la vida, incluidas las relaciones familiares. He aquí algunas de las atípicas notas en las que mencionaba a sus hijos y parientes.
«...el sano entendimiento debe estar preparado para todo lo que suceda; pero al que diga "deja vivir a mis queridos hijos, y que todos alaben lo que yo pueda hacer..."»
«De mi abuelo Vero he aprendido a ser gentil y manso, y a abstenerme de toda ira y pasión... He aprendido a tener vergüenza y a comportarme como un hombre. De mi madre he aprendido a ser religioso y generoso; y a abstenerme, no solo de hacer, sino de intentar cualquier mal; a contentarme con una dieta sobria, y a huir de todos los excesos propios de una gran riqueza».
Amor por lo que haces
el filósofo hizo hincapié en las virtudes axiológicas del hombre, como la decencia, la integridad y el cuidado de los demás para preservar el bien común. Escribió que para vivir una vida bendecida y divina, uno debe llevar sus asuntos con dignidad y amor por la gente y sin temeridad, hipocresía e insatisfacción con el propio destino. Personalmente con su ejemplo, Marco Aurelio demostró dedicación a su labor como gobernante, legislador y comandante militar.
«Ama el pequeño oficio que has aprendido, y conténtate con él».
«Las personas que aman lo que hacen se sumergen tanto en ello que hasta olvidan bañarse o comer. ¿Tienes menos respeto por tu propia naturaleza que el grabador por el grabado, el bailarín por el baile, el avaro por el dinero o el superficial por el estatus? Cuando están realmente poseídos por lo que hacen, prefieren dejar de comer y dormir antes que abandonar la práctica de sus artes».
Citas sobre la vida
Uno de los principios centrales del estoicismo es el cosmopolitismo, que defiende el sentido de pertenencia al mundo entero más que a una comunidad o nación determinada. Marco Aurelio, en particular, acogió esta idea de cosmopolitismo, creyendo en un parentesco universal entre los seres humanos, independientemente de su nacionalidad, etnia o condición social. Creía en la conexión de la humanidad y en la importancia del apoyo mutuo para el progreso.
«Los hombres existen por el bien de los demás. Enséñales entonces o aguántales». (Traducción del griego hecha por George Long)
Marco Aurelio prometió a la gente una sola recompensa: la paz mental total cuando se alcance el equilibrio absoluto dentro y fuera del mundo circundante:
«La felicidad de tu vida depende de la calidad de tus pensamientos».
«Cuando te levantes por la mañana, piensa en el precioso privilegio que es estar vivo: respirar, pensar, disfrutar, amar».
Para Marco Aurelio, si hay un obstáculo en tu camino que logre interrumpir tu acción, al mismo tiempo, no podrá cambiar tu aspiración espiritual de la misma manera.
«He aquí una regla para recordar en el futuro, cuando algo te tiente a sentir amargura: no digas "esto es una desgracia", sino "soportar esto con dignidad es buena fortuna"».
La belleza de la vida
Las citas inspiradoras añaden encanto al diario de Aurelio. Propuso encontrar formas de gozar con lo que ocurre en lugar de luchar contra lo que no se puede cambiar. Por ejemplo, tratar de encontrar belleza en la naturaleza, observar a la gente y admirar el arte.
«Contempla la belleza de la vida. Observa las estrellas y proyéctate a ti mismo corriendo con ellas».
«La tierra ama la lluvia, el orgulloso cielo ama dársela». «El mundo entero ama crear el porvenir. Por lo que le digo al mundo, comparto tu amor».
Amor virtuoso
Marco Aurelio creía en el amor virtuoso para expresar la integridad moral y la fuerza interior. Para él, el amor no era simplemente una emoción, sino un principio con raíces en. El amor y la amistad estoicos no requieren reciprocidad. El estoico es amable y gentil porque es virtuoso no porque una persona espere conseguir algo siendo amable con los demás.
«La mejor venganza es no ser como quien ocasionó la herida».
«No pierdas más tiempo discutiendo lo que debería ser un hombre bueno. Sé uno».
El cuidado atento y afectuoso de los demás es esencial entre las cualidades del carácter. Marco Aurelio, como otros estoicos, apeló a menudo a la «hermandad de la humanidad», a la «ciudadanía del mundo» y a la idea de que todos formamos parte del gran organismo de los seres humanos, animales inteligentes y sociales. Pero por muy crítico que fuera el emperador-filósofo con la naturaleza humana, veía un prójimo en cada persona porque todos forman parte de un todo ordenado y regido por la razón común. Y nadie es ideal.
«Cuando te levantes por la mañana, dite a ti mismo: las personas con las que trate hoy serán entrometidas, desagradecidas, arrogantes, deshonestas, celosas y ariscas. Son así porque no saben distinguir el bien del mal». (Traducción del griego hecha por Hays)
Los mentores estoicos enseñaron al futuro emperador Aurelio una disciplina increíblemente elevada de la mente y las emociones:
«Vive una buena vida. Si hay dioses y son justos, entonces no les importará lo devoto que hayas sido, sino que te acogerán en función de las virtudes con las que hayas vivido. Si hay dioses, pero injustos, entonces no debes querer adorarlos. Si no hay dioses, te habrás ido, pero habrás vivido una vida noble que perdurará en el recuerdo de tus seres queridos».
«No mostrar ira u otras emociones. Estar libre de pasión y, sin embargo, lleno de amor». (Traducción del griego hecha por Hays)
Aceptación
Las reflexiones de Marco Aurelio son ricas en pensamientos sobre las relaciones interpersonales y sociales. Creía que las emociones positivas o buenas de la vida se centran en la virtud, en lugar de en las emociones o «pasiones» dañinas y destructivas basadas en errores éticos. Estaba convencido de que las personas pueden cometer errores y de que ser piadoso y aceptar a los diferentes es bueno. He aquí una de las citas de Marco Aurelio sobre la aceptación:
«Cuando quieras deleitarte, piensa en las virtudes de los que viven contigo. Por ejemplo, la actividad de uno y la modestia de otro y la liberalidad de un tercero y alguna otra buena cualidad de un cuarto».
«El deber peculiar del hombre es amar incluso a quienes lo agravian».
Autoestima y autodisciplina
La idea que subyace a la filosofía de Marco Aurelio es contrarrestar las experiencias negativas desarrollando la fuerza interior y la resiliencia. Creía en el poder de la fuerza interior y la resistencia para superar la adversidad. Este respaldo interior sirve como fuente de impulso y renovación. ¿Cómo conseguimos este apoyo o respaldo interior? A través de la virtud. Por mucho que nos influyan los demás y sus creencias, seguimos siendo los protagonistas, los que en última instancia realizamos la acción.
«Con qué facilidad nos amamos a nosotros mismos por encima de los demás, y sin embargo damos más importancia a sus opiniones que a nuestra propia estimación de nosotros mismos...»
Haz solo lo que tu mente te diga. Marco Aurelio creía que esta es la parte dominante de nuestro ser, la que dirige las acciones en beneficio de las personas. Puedes cambiar de opinión si alguien te señala tu error o consigue convencerte. Marco Aurelio creía que el cambio de opinión debía guiarse por principios de justicia, bien común e integridad moral, y no por la conveniencia personal, el placer o el deseo de gloria.
«A menudo me he preguntado cómo es que cada hombre se ama a sí mismo más que al resto de los hombres, pero sin embargo da menos valor a su propia opinión de sí mismo que a la opinión de los demás».
Marco Aurelio creía que debemos dominar nuestra mente para controlar nuestros pensamientos y acciones. Para los estoicos vivir de acuerdo a la razón significaba vivir feliz.
«Hagan lo que hagan o digan lo que digan, por mi parte estoy ligado al bien. De la misma manera, una esmeralda, el oro o el color púrpura pueden proclamar siempre "haga lo que haga o diga lo que diga alguien, yo debo ser lo que soy y mostrar mi verdadera esencia"».
Cómo la filosofía de Marco Aurelio fue moldeada por los desafíos personales y políticos
La visión del mundo de Marco Aurelio fue definida por su experiencia de liderazgo y por su compromiso para efectuar sus tareas con integridad y compasión. Sus pensamientos y filosofías sobre las relaciones humanas fueron moldeados por su adopción en la familia imperial en la niñez, su brillante educación basada en el estoicismo y su posterior experiencia de gobernar con un co-gobernante, una esposa infiel y traiciones de socios como Avidio Casio.
Se enfrentó a todos los retos de la política romana: insidiosos de carrera, rivales celosos, patricios incompetentes y populistas, conspiradores a cada paso y el surgimiento de una nueva religión. Todas estas difíciles circunstancias le enseñaron a aceptar y perdonar a la gente y a ser virtuoso.
El reinado de Marco Aurelio fue uno de los periodos más desafiantes en la vida del Imperio Romano, pero la filosofía estoica le ayudó como forma de resolver los problemas para tener éxito en los asuntos públicos. Lideró el imperio cuando las situaciones interna y externa se habían deteriorado bruscamente, con una crisis económica aguda, hambruna y peste. Además, ocurrían guerras constantemente desde Britannia (lo que hoy se conoce como Gran Bretaña) hasta Siria. Los finales felices no eran frecuentes en esa época. Marco Aurelio creía que las necesidades primordiales de un gobernante eran el amor y respeto por el pueblo y el cumplimiento de sus tareas.
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